jueves, 21 de marzo de 2013

The city as site, Tom Finkelpearl

El contexto público afecta directamente al mundo del arte, y éste se encuentra en una constante transformación, ya que es víctima directa de los eventos sociales.

Después de la segunda Guerra Mundial, surge el nuevo sueño americano, una idea colectiva acerca de lo que es la felicidad y el bienestar. Esta consistió en obtener objetos, una buena vida consistía en tener un coche, una lavadora, una casa propia etc..

Es en este momento en que lo privado cobra vida y se vuelve un objetivo en las familias estadounidenses. La independecia y la individualidad se vuelven primordiales.

Esta nueva situación genera un desinterés por los espacios públicos, se vuelven desolados, ya no hay interacción en estos ya que la gente se transporta en auto propio de su casa al trabajo, todo consiste en hacer evidente y reafirmar lo privado, lo que te pertenece.

Al mismo tiempo que la ciudad se llenó de autos fué necesario construir autipistas para que estos circularan por la ciudad. Estas nuevas construcciones se realizaron de una forma imprudente ya que razgaron el corazón de los barrios, además se volvieron trazos de división en la ciudad que rezagaron a los barrios más pobres de los demás. Estas nuevas rutas no fuerón más que una segregación urbana, de una lado se encontraban los veteranos italianos y judíos y por el otro los "negros".

La llamada "zona roja" delimitaba espacios de la ciudad que se consideraban peligrosos, pero más que nada tenía que ver con prejuicios raciales.

Los nuevos suburbios de "blancos" hacen una aportanción a la percepción del rol femenino en la familia y en la sociedad. En este momento de la historia era prioridad emplear a los veteranos por lo que se removió a las muejeres de los empleos que habían ocupado en tiempos de guerra.



Hay dos tipos de arquitectura que dominan el movimiento de la modernidad:
  - estandar, ambiente de máquina, procesado, tecnológico
  - lugares con vista abierta, sol, aire libre y puro, espacios verdes (el resultado fueron los jardines verticales).

Los hermanos Levitt, realizaron las "Levittowns" eran un conjunto de casas idénticas en lotes también idénticos, solo se diferenciaban por pequeños detalles exteriores, estas fueron habitadas por veteranos italianos y jidíos. En el contrato firmado por los habitantes de estos suburbios existía una cláusula que de decia que estas viviendas no podían ser habitadas ni ocupadas por miembros de otra raza que no fuera de raza Caucásica.






















 











Pruitt-Igoe fue un gran proyecto urbanístico desarrollado entre 1954 y 1955, poco tiempo después de haberse construido, las condiciones de vida en Pruitt-Igoe comenzaron a decaer; y en la década de 1960, la zona se encontraba en pobreza extrema, con altos índices de criminalidad y segregación. El complejo fue diseñado por el arquitecto Minoru Yamasaki.
A las tres de la tarde del 16 de marzo de 1972, menos de 20 años después de su construcción, el primero de los 33 gigantescos edificios fue demolido. Las dimensiones del fracaso de Pruitt-Igoe, que se convirtió en un icono emblemático, provocó un intenso debate sobre política de vivienda pública, su destrucción fue descrita por el arquitecto paisajista, teórico e historiador de la arquitectura Charles Jencks como «el día en que murió la arquitectura moderna».


La historia del arte es la historia del arte público. Michael Brenson argumenta que la tarea de los artistas modernos es la de sanar las divisiones del mundo moderno, por otro lado los museos que se identifican por tener pinturas y esculturas modernistas son instituciones en las que existe un sistema curatorial que decide a favor de intereses económicos de la administración conformada por gente “blanca”. Es por esto que el modernismo en el arte es una víctima y un síntoma de la fragmentación social. A pesar de esto el modernismo realizó potentes críticas incluso cuando lo dominaba la ideología dominante.
En 1961, Jane Jacobs realizó una fuerte crítica hacia el urbanismo modernista, dijo que la utopía de Le Corbusier´s era un macabro plan de  división. La libertad del modernismo de Le Corbusier´s era una libertad para otros. Jacobs contrata esto con la “liberta de la ciudad” que se percibía en espacios urbanos más tradicionales, con un orden complejo de interacción, un orden compuesto por movimieto y cambios, a lo que llamo “arte de la ciudad” . Fuera del rígido y geométrico orden de las ciudades modernas, los individuos forman parte de un “ballet urbano”  en el que cada persona es capaz de improvisar en la relación con el otro. Jacob hace un llamado para realizar un proceso de diseño urbano democrático en el que se incluya la voz de los usuarios.
Los arquitectos tienen un rol importante en la situación en la que se encuentra la ciudad, pero no toda la culpa. La Comisión Nacional de problemas urbanos culpó a los arquitectos de los proyectos de viviendas.
Ante la problemática que se vivía, se hizo un nuevo plan para renovar los espacios urbanos en la cual estuvieron involucradas personas de las comunidades afectadas, lo cual fue una drástica y controversial salida y a partir de esto la policía local anunció irregularidades, ya que el empoderamiento de la cmunidad fue vista como grupos fuera de control.
Inclusión, adición, híbrido, fueron palabras que utilizaron en escritos de la estructura urbana asi como Greemberg para nombrar las necesidades de la época. Complejidad y contradicción en la arquitectura, de Robert Venturi, fue un texto que deja en claro estas necesidades, se dice que este texto es el punto de partida para el postmodernismo en la arquitectura. Esta temprana formulación del postmodernismo llama al retorno de la decoración, el simbolismo y a humanizar la estructura urbana.
En la mitad de la década de los 60´s las ciudades de los Estados Unidos se encontraban en crisis. Disturbios ocurrían con frecuencia hasta 1968, pero el crimen seguía en aumento.
En el verano de 1967 se instala una escultura de Picasso en Chicago, lo cual fue un pretexto para estar felices en épocas difíciles, esta ecultura le iba a dar una nueva imagen a la ciudad.




Charles Cuningham, director del Instituto de Arte comentó “aquellos que no han experimentado este tipo de arte, es probable que no le guste, pero esta bien, en poco tiempo será aceptado por el hombre en la calle, asi como Van Gogh y otros los son ahora.” Esto fue como un mantra a favor del arte moderno ocupando las calles.

Mientras tanto en Washington en 1967 el “National Endowment for de Arts” creó un programa de arte en espacios público para “dar acceso público al mejor  arte de nuestros tiempos fuera de las paredes del museo”  La primera aportación fue La Grande Vitesse, de Alexander Calder, el cual se instaló en el centro cívico de Michigan.